La Casa Real Sueca anunció que Sofia Hellqvis se casará en junio próximo con el príncipe Carlos Felipe. Fue ganadora de un concurso de TV y posó semidesnuda.
Anunciaron juntos su boda para el próximo junio.
Ni ella, que se declara una optimista nata, pensaba en un final de cuento de hadas. Pero lo tendrá: el 13 de junio de 2015 se casará con el príncipe Carlos Felipe de Suecia. ¿Y por qué tanto alboroto? Porque Sofia Hellqvist tiene un pasado poco convencional para integrarse a una casa real.
A sus 29 años, hace ocho que es una figura pública; ganó el concurso televisivo Hotel Paradise, similar a Gran Hermano. Allí fue que, como suele ocurrir en estos casos, comenzaron a hurgar sobre su pasado. Y lo que encontraron sirvió como comidilla para los medios de comunicación. A los 20 años protagonizó una producción de fotos para la revista masculina Slitz, donde aparecía solo con una tanga y una boa alrededor del cuerpo, imágenes que diarios locales se encargaron de volver a reproducir. De allí, según consigna El País de Madrid, partió hacia Nueva York, metrópolis donde se formó como profesora de yoga. Y tomó una decisión nada menor, que la condicionaría: trabajar como actriz erótica en Las Vegas junto a Jenna Jameson, una empresaria conocida como La reina del porno.
Después, decidió un cambio drástico y se vinculó con organizaciones que ayudan a mujeres en Ghana. A la vuelta, su destino volvería a cambiar radicalmente cuando conoció a Carlos Felipe. "Nos conocimos en un almuerzo. Estaba sentado con unos amigos y tú entraste con un amigo tuyo que conocía a los míos. La primera vez, algo hizo clic", contó el príncipe en una entrevista que brindó con Sofia que al diario Dalarnas Tidningar. Ella continuó el relato: "Nos miramos de una forma un poco tímida, y sí, algo hizo clic, pero que iba a terminar de esta forma nunca lo habría imaginado".
Después de eso vino la primera cita, que distó de ser convencional. "Me preguntaste si quería ir a los karts, supongo que querías mostrarme tus habilidades al volante", le recordó ella, según Hola. El príncipe admitió que pensó esa salida como "algo tranquilo" pero después aparecieron varios de sus amigos y también se despertó su "demonio": la pasión por competir. De todos modos, ambos recuerdan ese momento con cariño.
A esa altura, tampoco el príncipe gozaba de una excelente fama. Es más, ya antes de conocerse su relación con Sofia era visto como la oveja negra del clan que integra junto a sus padres, el rey Carlos Gustavo y la reina Silvia, y sus hermanas Victoria y Magdalena. Los medios solían referirse a él como el playboy de la monarquía escandinava. Acostumbrado a conducir porsches de carrera, es considerado uno de los solteros más codiciados del mundo.
Una de sus ventajas es que no tiene la presión de ser el futuro rey. La categoría de heredero le duró solo unos meses, ya que poco después de su nacimiento, en mayo de 1979, Suecia cambió las leyes y su hermana mayor, Victoria, será entonces la monarca.
De Carlos Felipe se sabe que es un gran amante de los deportes como cacería, atletismo, fútbol, natación, esquí, navegación a vela y automovilismo. También que le interesan el diseño gráfico y el dibujo. De hecho, hacia esas disciplinas encaminó sus estudios universitarios. También es ingeniero agrónomo, estudió economía empresarial y, por como es usual en la monarquía, tiene una amplia formación militar.
Fue en 2010 cuando su romance con Sofia Hellqvist se hizo pública. Lo menos que se dijo fue que escandalizaba a su país. A él poco pareció importarle; siguió cultivando un perfil bajo y adelante con su relación. En 2011 la Casa Real oficializó que habían empezado a convivir. Ellos no hablaron en público de la relación hasta estas semanas, cuando al compromiso se sumaron dos notas periodísticas. Élla lo define como alguien humilde, cálido y dulce. Él tampoco escatimó adjetivos: dijo que es maravillosa, humilde, lista e inteligente. Que coman perdices.
YA ES PARTE DE LA FAMILIA
Radiantes, Carlos Felipe y Sofia anunciaron la semana pasada su boda para el próximo año (izquierda). Si bien conviven, él fue tradicional y le hizo el pedido de rodillas. Ella ya había comenzado a aparecer en actividades oficiales y esta semana participó por primera vez de los actos con motivo de la apertura del Parlamento. Allí elogiaron su vestuario, acorde con la ocasión.
UNA HISTORIA REPETIDA
Dicen que de tal palo tal astilla. Y en esto, el príncipe Carlos Felipe no sería la excepción. Hace cuatro décadas su padre, el ahora rey Carlos Gustavo, provocaba gran impacto cuando anunció que quería casarse con una azafata alemana. En esa ocasión, como ahora, también la pareja prosperó; Carlos Gustavo consiguió el permiso para contraer matrimonio con la actual reina Silvia, con quien llevaba una relación de cuatro años a escondidas, informó El País de Madrid.
En los últimos años Carlos Felipe tuvo también que enfrentar los prejuicios sobre cómo su familia tomaba la relación con Sofia. Incluso, varios medios de comunicación salieron a decir que el tema provocaba rispideces con sus hermanas. Él, poco afecto a los mirófonos, se encargó de desmentirlo. "Todo son invenciones. Los tres hermanos nos llevamos muy bien".
Anunciaron juntos su boda para el próximo junio.
Ni ella, que se declara una optimista nata, pensaba en un final de cuento de hadas. Pero lo tendrá: el 13 de junio de 2015 se casará con el príncipe Carlos Felipe de Suecia. ¿Y por qué tanto alboroto? Porque Sofia Hellqvist tiene un pasado poco convencional para integrarse a una casa real.
A sus 29 años, hace ocho que es una figura pública; ganó el concurso televisivo Hotel Paradise, similar a Gran Hermano. Allí fue que, como suele ocurrir en estos casos, comenzaron a hurgar sobre su pasado. Y lo que encontraron sirvió como comidilla para los medios de comunicación. A los 20 años protagonizó una producción de fotos para la revista masculina Slitz, donde aparecía solo con una tanga y una boa alrededor del cuerpo, imágenes que diarios locales se encargaron de volver a reproducir. De allí, según consigna El País de Madrid, partió hacia Nueva York, metrópolis donde se formó como profesora de yoga. Y tomó una decisión nada menor, que la condicionaría: trabajar como actriz erótica en Las Vegas junto a Jenna Jameson, una empresaria conocida como La reina del porno.
Después, decidió un cambio drástico y se vinculó con organizaciones que ayudan a mujeres en Ghana. A la vuelta, su destino volvería a cambiar radicalmente cuando conoció a Carlos Felipe. "Nos conocimos en un almuerzo. Estaba sentado con unos amigos y tú entraste con un amigo tuyo que conocía a los míos. La primera vez, algo hizo clic", contó el príncipe en una entrevista que brindó con Sofia que al diario Dalarnas Tidningar. Ella continuó el relato: "Nos miramos de una forma un poco tímida, y sí, algo hizo clic, pero que iba a terminar de esta forma nunca lo habría imaginado".
Después de eso vino la primera cita, que distó de ser convencional. "Me preguntaste si quería ir a los karts, supongo que querías mostrarme tus habilidades al volante", le recordó ella, según Hola. El príncipe admitió que pensó esa salida como "algo tranquilo" pero después aparecieron varios de sus amigos y también se despertó su "demonio": la pasión por competir. De todos modos, ambos recuerdan ese momento con cariño.
A esa altura, tampoco el príncipe gozaba de una excelente fama. Es más, ya antes de conocerse su relación con Sofia era visto como la oveja negra del clan que integra junto a sus padres, el rey Carlos Gustavo y la reina Silvia, y sus hermanas Victoria y Magdalena. Los medios solían referirse a él como el playboy de la monarquía escandinava. Acostumbrado a conducir porsches de carrera, es considerado uno de los solteros más codiciados del mundo.
Una de sus ventajas es que no tiene la presión de ser el futuro rey. La categoría de heredero le duró solo unos meses, ya que poco después de su nacimiento, en mayo de 1979, Suecia cambió las leyes y su hermana mayor, Victoria, será entonces la monarca.
De Carlos Felipe se sabe que es un gran amante de los deportes como cacería, atletismo, fútbol, natación, esquí, navegación a vela y automovilismo. También que le interesan el diseño gráfico y el dibujo. De hecho, hacia esas disciplinas encaminó sus estudios universitarios. También es ingeniero agrónomo, estudió economía empresarial y, por como es usual en la monarquía, tiene una amplia formación militar.
Fue en 2010 cuando su romance con Sofia Hellqvist se hizo pública. Lo menos que se dijo fue que escandalizaba a su país. A él poco pareció importarle; siguió cultivando un perfil bajo y adelante con su relación. En 2011 la Casa Real oficializó que habían empezado a convivir. Ellos no hablaron en público de la relación hasta estas semanas, cuando al compromiso se sumaron dos notas periodísticas. Élla lo define como alguien humilde, cálido y dulce. Él tampoco escatimó adjetivos: dijo que es maravillosa, humilde, lista e inteligente. Que coman perdices.
YA ES PARTE DE LA FAMILIA
Radiantes, Carlos Felipe y Sofia anunciaron la semana pasada su boda para el próximo año (izquierda). Si bien conviven, él fue tradicional y le hizo el pedido de rodillas. Ella ya había comenzado a aparecer en actividades oficiales y esta semana participó por primera vez de los actos con motivo de la apertura del Parlamento. Allí elogiaron su vestuario, acorde con la ocasión.
UNA HISTORIA REPETIDA
Dicen que de tal palo tal astilla. Y en esto, el príncipe Carlos Felipe no sería la excepción. Hace cuatro décadas su padre, el ahora rey Carlos Gustavo, provocaba gran impacto cuando anunció que quería casarse con una azafata alemana. En esa ocasión, como ahora, también la pareja prosperó; Carlos Gustavo consiguió el permiso para contraer matrimonio con la actual reina Silvia, con quien llevaba una relación de cuatro años a escondidas, informó El País de Madrid.
En los últimos años Carlos Felipe tuvo también que enfrentar los prejuicios sobre cómo su familia tomaba la relación con Sofia. Incluso, varios medios de comunicación salieron a decir que el tema provocaba rispideces con sus hermanas. Él, poco afecto a los mirófonos, se encargó de desmentirlo. "Todo son invenciones. Los tres hermanos nos llevamos muy bien".