San Lorenzo
El vicepresidente del finalista argentino de la Copa Libertadores se mostró muy emocionado en la previa a la serie con Nacional de Paraguay: "Seguramente mi viejo estaría muy feliz con este momento".
"Seguramente mi viejo estaría muy feliz con este momento. Además estaría orgulloso de ver a su hijo trabajando en el club de sus amores. Pienso en él, en lo que sentiría, y se me caen las lágrimas", cuenta Marcelo Tinelli, vicepresidente de San Lorenzo, finalista por primera vez en su historia de la Copa Libertadores.
El presentador de televisión, el showman, la estrella; el pibe que vino de Bolívar sin un centavo. Todos esos personajes que conviven en el cuerpo de Marcelo Tinelli le dejan lugar ahora al hincha del Ciclón. A la emoción en la piel, a la lágrima fácil y a evocar a los seres queridos.
En diálogo con Olé, Tinelli contó sus sensaciones de cara a la final histórica ante Nacional de Paraguay: "Compartir una final con mi hijo es el sueño de toda una vida. Una vez Francisco me dijo que le gustaría ver jugar a San Lorenzo una final de Libertadores y yo le dije que seguramente él lo iba a llegar a ver. Sin embargo, me contestó que tenía ese deseo, pero que quería que fuera conmigo, los dos juntos. Me emocionó mucho. Hoy se concreta", contó. Y habló de su otro varón, Lorenzo: "No lo había pensado, pero ojalá mi hijo haya venido con regalo. Sería un sueño".
"Por eso uno tiene este sueño de ganar la Copa. Por todos nuestros familiares que hoy no están y que nos metieron en la sangre la pasión azulgrana. Y que también soñaron con esto", prosiguió Tinelli, conmovido como hincha, frío como dirigente de fútbol.
"Este equipo me genera un orgullo increíble, me emociona. Me emocionan las lágrimas de Mercier, del Pipi Romagnoli, las de todos. Se los nota muy enchufados detrás de conseguir el objetivo. Por eso todos los hinchas nos sentimos tan identificados", alentó al final.
El vicepresidente del finalista argentino de la Copa Libertadores se mostró muy emocionado en la previa a la serie con Nacional de Paraguay: "Seguramente mi viejo estaría muy feliz con este momento".

"Seguramente mi viejo estaría muy feliz con este momento. Además estaría orgulloso de ver a su hijo trabajando en el club de sus amores. Pienso en él, en lo que sentiría, y se me caen las lágrimas", cuenta Marcelo Tinelli, vicepresidente de San Lorenzo, finalista por primera vez en su historia de la Copa Libertadores.
El presentador de televisión, el showman, la estrella; el pibe que vino de Bolívar sin un centavo. Todos esos personajes que conviven en el cuerpo de Marcelo Tinelli le dejan lugar ahora al hincha del Ciclón. A la emoción en la piel, a la lágrima fácil y a evocar a los seres queridos.
En diálogo con Olé, Tinelli contó sus sensaciones de cara a la final histórica ante Nacional de Paraguay: "Compartir una final con mi hijo es el sueño de toda una vida. Una vez Francisco me dijo que le gustaría ver jugar a San Lorenzo una final de Libertadores y yo le dije que seguramente él lo iba a llegar a ver. Sin embargo, me contestó que tenía ese deseo, pero que quería que fuera conmigo, los dos juntos. Me emocionó mucho. Hoy se concreta", contó. Y habló de su otro varón, Lorenzo: "No lo había pensado, pero ojalá mi hijo haya venido con regalo. Sería un sueño".
"Por eso uno tiene este sueño de ganar la Copa. Por todos nuestros familiares que hoy no están y que nos metieron en la sangre la pasión azulgrana. Y que también soñaron con esto", prosiguió Tinelli, conmovido como hincha, frío como dirigente de fútbol.
"Este equipo me genera un orgullo increíble, me emociona. Me emocionan las lágrimas de Mercier, del Pipi Romagnoli, las de todos. Se los nota muy enchufados detrás de conseguir el objetivo. Por eso todos los hinchas nos sentimos tan identificados", alentó al final.