Te damos la bienvenida a la comunidad de T!Estás a un paso de acceder al mejor contenido, creado por personas como vos.

O iniciá sesión con
¿No tenés una cuenta?




1. No toman una posición porque creen tener la razón, sino porque no temen equivocarse

La gente arrogante y vanidosa tiende a tomar una posición y luego proclamar, fanfarronear y despreciar totalmente las diferentes opiniones o puntos de vista. Ellos saben que tienen la razón y quieren que lo sepas. Su comportamiento no es un signo de confianza y es el sello de un matón intelectual.
A las personas verdaderamente seguras no les importa estar equivocadas. Sienten que averiguar lo correcto es mucho más importante que tener la razón. Si comenten un error, son lo suficientemente seguros como para volver atrás con gracia. Ellas a menudo admiten que no tienen todas las respuestas, al contrario de los matones intelectuales que nunca lo hacen.



2. Escuchan 10 veces más de lo que hablan




Alardear es una máscara para la inseguridad. Las personas verdaderamente seguras son tranquilas y sin pretensiones. Ellos ya saben lo que piensan, así que quieren saber lo que tú tienes en mente.
Por eso hacen preguntas abiertas que le dan a las personas la libertad de ser reflexivos e introspectivos. Preguntan por lo que haces, cómo lo llevas a cabo, qué es lo que te gusta de aquello, qué aprendes de eso, y qué deben hacer si se encuentran en una situación similar.
Ellos desean saber más y entienden que la única manera de aprender más es escuchando.




3. Esquivan el centro de atención para que esté sobre los demás

Tal vez sea cierto que hicieron la mayor parte del trabajo. Tal vez realmente superaron los mayores obstáculos. Tal vez sí se volvieron un grupo de individuos dispares en un equipo de muy alto rendimiento. A las personas verdaderamente seguras no les importa o al menos no lo demuestran, ya que en el interior están orgullosas porque saben lo que han logrado y no necesitan la gloria.
No necesitan la validación de los demás, porque la verdadera validación viene de dentro, así que se paran atrás y celebran sus logros a través de los demás. Dejan que los otros brillen, inyectándolos de confianza que ayuda a esas personas a tener más confianza.



4. Libremente piden ayuda




Mucha gente siente que pedir ayuda es un signo de flaqueza, ya que implícito en la solicitud está la falta de conocimiento, habilidad o experiencia.
Las personas con confianza en sí mismas son lo suficientemente seguras como para admitir una debilidad, así que a menudo piden que los auxilien con algo. Además saben que cuando buscan ayuda le dan a esa persona un gran cumplido.
Decir “¿Me puedes ayudar?”, muestra un gran respeto por la experiencia y el juicio del individuo. De lo contrario, no le pedirías a él.




5. Piensan: “¿Por qué no yo?”

Muchas personas sienten que tienen que esperar: para ser promovido, para ser contratado, para ser seleccionado o para ser descubierto (como el viejo cliché de Hollywood).
Las personas verdaderamente seguras saben que el acceso es casi universal y que pueden conectarse con casi cualquier persona a través de los medios sociales (todo el mundo que conoces se vincula a alguien que necesitas). Ellos saben que pueden tener su propia financiación, crear sus propios productos, construir sus propias relaciones y redes, eligiendo su propio camino.




6. No critican a las demás personas




En términos generales, la gente que le gusta el chisme, que le gusta hablar mal de los demás, lo hace porque espera verse mejor comparativamente.
La única comparación que alguien realmente seguro hace es con el individuo que era ayer y con la persona que aspira a convertirse algún día.
7. No tienen miedo de parecer tontos
Sin duda correr por todas partes en ropa interior es irse a los extremos, pero cuando eres realmente seguro, no te importa a veces estar en una situación en la que no estás en tu mejor momento (y, por extraño que parezca, la gente tiende a respetarte más por eso).




8. Y son dueños de sus errores




La inseguridad tiende a alimentar la artificialidad, mientras que la confianza engendra sinceridad y honestidad.
Es por eso que las personas verdaderamente seguras admiten sus errores. No les importa servir para un cuento con moraleja. No les importa ser una fuente de burlas. Cuando eres auténtico y sin pretensiones, la gente no se burla de ti, sino que se ríe contigo.




9. Sólo buscan la aprobación de las personas que realmente importan

¿Dices que tienes 10 mil seguidores en Twitter? Estupendo ¿20 mil amigos en Facebook? Genial ¿Una red profesional y social de cientos e incluso miles de individuos? Buenísimo. Sin embargo, eso también palidece en comparación a ganar la confianza y el respeto de las pocas personas en tu vida que realmente merecen la pena, ya que así no importa a dónde vayas o qué intentes, lo haces con confianza porque sabes que ellos estarán detrás de ti.