Surgió al final del milenio, junto con el boom de las grabadoras de CD. Por aquel entonces era algo casi impensado que por solamente unos pocos pesos un amigo nos podía grabar un CD de música que bajaba de Napster para poder escucharla en nuestro reproductor de CD’s de toda la vida, el cual hasta entonces, solamente estaba acostumbrado a pasar unos pocos discos originales comprados por nuestros escuetos bolsillos.
Por entonces, Easy CD Creator de Roxio era el mejor – y por sobre todo más sencillo – software de grabación de CD’s. Bastaba con soltar y arrastra los archivos para tener en, aproximadamente 38 minutos, un CD grabado. Si, porque por entonces las grabadoras eran de 2X por lo que tardaban en grabarse la mitad del tiempo de reproducción que contenían.
Pero las primeras versiones del Easy CD Creator, si bien eran fáciles de usar, también eran bastante inestables. Recordemos que eran épocas de Windows 98SE y partiendo desde un OS muy amigo de las pantallas azules. Si a eso le sumábamos un software de grabación algo bugeado, la combinación era fatal, además, ¡había que comerse más de media hora para saber si la grabación había sido exitosa!
Como alternativa aparecía Nero Burning Rom, un software alemán que si bien no era ni la mitad de amigable que el producto de Roxio, era sustancialmente mejor en muchos aspectos. Nero, además de ser más estable, permitía hacer cosas como “estirar un poco más la grabación” para llegar a los 708MB. Sin dudas era un software más profesional y enseguida comenzó a ganar adeptos por todos lados.
Por entonces, Easy CD Creator de Roxio era el mejor – y por sobre todo más sencillo – software de grabación de CD’s. Bastaba con soltar y arrastra los archivos para tener en, aproximadamente 38 minutos, un CD grabado. Si, porque por entonces las grabadoras eran de 2X por lo que tardaban en grabarse la mitad del tiempo de reproducción que contenían.
Pero las primeras versiones del Easy CD Creator, si bien eran fáciles de usar, también eran bastante inestables. Recordemos que eran épocas de Windows 98SE y partiendo desde un OS muy amigo de las pantallas azules. Si a eso le sumábamos un software de grabación algo bugeado, la combinación era fatal, además, ¡había que comerse más de media hora para saber si la grabación había sido exitosa!
Como alternativa aparecía Nero Burning Rom, un software alemán que si bien no era ni la mitad de amigable que el producto de Roxio, era sustancialmente mejor en muchos aspectos. Nero, además de ser más estable, permitía hacer cosas como “estirar un poco más la grabación” para llegar a los 708MB. Sin dudas era un software más profesional y enseguida comenzó a ganar adeptos por todos lados.

Y por si algo le faltaba a este genial software fue una versión “amigable para el usuario común”. Con la versión 5 se notó una mejora sustancial en la interfaz que nos iba preguntando “qué quiere hacer” y hasta después de grabar un CD nos permitía imprimir las carátulas, entre otras tantas cosas. Nero se había convertido en un todo en uno y con la versión 6 se volvió quizás en una de las mejores suites que ha dado la informática.
Corría la mitad de la década pasada y con Nero sucedería lo mismo que con muchas suites y programas conocidos. Como ya habían satisfecho la necesidad del usuario – en este caso, grabar CD’s – los desarrolladores comenzaban a sumarle y sumarle agregados hasta llegar a una suite realmente inflada. Nero se había inflado demasiado y en lugar de ser un programa para grabar CD’s había perdido la brújula y hasta tenía un visualizador de imágenes (que era terrible).
Corría la mitad de la década pasada y con Nero sucedería lo mismo que con muchas suites y programas conocidos. Como ya habían satisfecho la necesidad del usuario – en este caso, grabar CD’s – los desarrolladores comenzaban a sumarle y sumarle agregados hasta llegar a una suite realmente inflada. Nero se había inflado demasiado y en lugar de ser un programa para grabar CD’s había perdido la brújula y hasta tenía un visualizador de imágenes (que era terrible).

Al menos entre los entusiastas Nero había pasado de ser un software respetado a hacer un tragón de recursos bastante odiado. Por suerte siempre existirían las versiones viejas para la mayoría de los conocidos, aunque siempre había alguien que te pedía la última y ahí estabas, instalando una suite más completa que Office para que graben un CD. Creo que el error de Nero fue ese, querer abarcar todo.
De todas maneras seguramente las mentes detrás de todas las empresas que se dedicaban al mundo de la grabación ya sabían lo que se avecinaba: los medios ópticos estaban destinados a desaparecer, tarde o temprano. Quizás pasó mas tarde que temprano, pero pasó y hoy salvo algún disco de instalación o para algún driver de una impresora recién comprada, casi no se usan.
Quizás Nero, como los de Roxio y otros tantos softwares de grabación intentaron exprimir hasta el máximo a la gallina de los huevos de oro mientras estos huevos venían planos, con un agujero en el medio y tenían 12 centímetros y poco más de diámetro. Los medios ópticos de almacenamiento, tanto los CD’s como los DVD’s han impulsado de sobremanera a la informática y han permitido el comienzo de cierta comunión entre la PC como medio de distribución de contenido hacia los demás dispositivos hogareños.
De todas maneras seguramente las mentes detrás de todas las empresas que se dedicaban al mundo de la grabación ya sabían lo que se avecinaba: los medios ópticos estaban destinados a desaparecer, tarde o temprano. Quizás pasó mas tarde que temprano, pero pasó y hoy salvo algún disco de instalación o para algún driver de una impresora recién comprada, casi no se usan.
Quizás Nero, como los de Roxio y otros tantos softwares de grabación intentaron exprimir hasta el máximo a la gallina de los huevos de oro mientras estos huevos venían planos, con un agujero en el medio y tenían 12 centímetros y poco más de diámetro. Los medios ópticos de almacenamiento, tanto los CD’s como los DVD’s han impulsado de sobremanera a la informática y han permitido el comienzo de cierta comunión entre la PC como medio de distribución de contenido hacia los demás dispositivos hogareños.
Y vos lince, ¿te acordás de Nero y esa dorada época de la grabación de CD’s?¿Seguis usandolo o ya es pasado?