El insólito hecho se registró en Estados Unidos cuando luego de una cesárea los médicos quitaron del vientre de una mujer a la criatura con el saco amniótico intacto.
Ocurrió en Estados Unidos y la imagen tomada por los médicos recorre el mundo. La mujer dio a luz por cesárea y los médicos se encontraron con el feto dentro de la bolsa, la cual se encontraba intacta.
La particularidad de este caso radica en que cuando la mujer da a luz el saco se rompe, pero en este parto lo inusual fue que cuando los doctores quisieron sacar al pequeño se dieron cuenta que estaba dentro de la bolsa.
El saco amniótico es la bolsa que cubre al embrión y que se forma entre el octavo y noveno día de la fecundación. En el interior también se encuentra el líquido amniótico que protege al niño de cualquier golpe y de un movimiento involuntario de la madre
Son casos muy raros: tan solo uno de cada 80.000 bebés que nacen lo hacen con las membranas enteras, sin romper. Por eso esta foto está dando la vuelta a la Red: la foto del bebé que nació con el saco amniótico intacto.
Bien porque se ha roto aguas, bien porque se ha roto en el hospital, el saco amniótico, esa fina cubierta de dos membranas que cubre al feto suele estar roto. Por eso sorprende esta inusual imagen que ha sido compartida más de 23.000 veces en Facebook en pocos días.
En concreto, la vemos en Facebook de “Marie Jeanne, accompagnante à la naissance”, que señala que el origen de la foto proviene de un Tumblr que a su vez remite como origen a otro Tumblr,“Katiohead”, que mantiene una matrona de Oregón y en la que no se ofrecen más datos sobre fecha o lugar del parto.
Realmente es un momento único, y muy corto, ya que al bebé que nace de este modo enseguida le rompen el saco amniótico para poder cortar y pinzar el cordón.
Se trata de un “parto velado”, que es muy raro y puede suceder en parto natural o por cesárea (como parece que fue el de la foto). Ver al bebé inmerso en el líquido amniótico, tal y como estaba hace unos minutos en el vientre materno, es impresionante.
Aquí podemos ver otro ejemplo de un bebé nacido con el saco amniótico intacto tras una cesárea, incluso en la fotografía parece apreciarse al bebé succionando su dedo en el interior del saco. En este otro caso tenemos el vídeo de un parto vaginal en el agua y el bebé nacido en su bolsa amniótica.
Si en los hospitales se respetaran más los ritmos del parto y no se produjera tan habitualmente la rotura de membranas de forma artificial, tal vez estaríamos más acostumbrados a esta imagen.
Recordemos que hay investigaciones que aseguran que la rotura artificial de la bolsa no implica un parto más rápido y la OMS argumenta que no está justificada la rotura precoz artificial de membranas como procedimiento de rutina.
Realmente me parece impresionante la foto del bebé que ha nacido con el saco amniótico intacto, no me extraña que esté siendo un fenómeno en internet que se suma a esas imágenes increíbles que de vez en cuando nos llegan.
Entre muchos de los mitos que rodean al parto, es posible que hayáis oído hablar del parto seco, una expresión utilizada (más antes que ahora) cuando se produce la rotura de la bolsa amniótica antes de que comiencen las contracciones.
El llamado parto seco no es realmente del todo seco. Cuando se rompe la bolsa siempre queda algo de líquido amniótico dentro del útero rodeando al bebé y además la mujer sigue regenerándolo.
Cada parto es diferente. La bolsa puede romperse espontáneamente antes o durante las contracciones, incluso en algunos casos no se rompe hasta el momento en que el bebé asoma la cabeza y hasta a veces el bebé nace dentro de la bolsa.
Pero la rotura de la bolsa amniótica también puede ser artificial, es decir que la matrona perfora las membranas por medio de una maniobra llamada amniotomía.
Hoy en día es bastante habitual la práctica médica de romper aguas de forma artificial supuestamente para acortar el trabajo de parto, sin embargo hay investigaciones que aseguran que la rotura artificial de la bolsa no implica un parto más rápido.
Por su parte, la OMS argumenta que no está justificada la rotura precoz artificial de membranas como procedimiento de rutina.
Una vez rota la bolsa, por lo general se espera a que se desencadene el parto en las siguientes 24 horas (depende del centro y de las características del parto puede ser menos o más tiempo).
Si no se produce, se provoca el parto para evitar una infección ya que la bolsa actúa como barrera de protección ante los gérmenes que pudieran ascender por la vagina. Al romperse la bolsa el riesgo de infección es mayor a medida que pasa el tiempo, sobre todo si se producen tactos vaginales.
Se cree que el parto seco es más doloroso que el parto en el que se rompen aguas de forma tardía ya que con la bolsa intacta el líquido amniótico ayuda a atenuar la intensidad del dolor de las contracciones.
Ocurrió en Estados Unidos y la imagen tomada por los médicos recorre el mundo. La mujer dio a luz por cesárea y los médicos se encontraron con el feto dentro de la bolsa, la cual se encontraba intacta.
La particularidad de este caso radica en que cuando la mujer da a luz el saco se rompe, pero en este parto lo inusual fue que cuando los doctores quisieron sacar al pequeño se dieron cuenta que estaba dentro de la bolsa.

El saco amniótico es la bolsa que cubre al embrión y que se forma entre el octavo y noveno día de la fecundación. En el interior también se encuentra el líquido amniótico que protege al niño de cualquier golpe y de un movimiento involuntario de la madre
Son casos muy raros: tan solo uno de cada 80.000 bebés que nacen lo hacen con las membranas enteras, sin romper. Por eso esta foto está dando la vuelta a la Red: la foto del bebé que nació con el saco amniótico intacto.
Bien porque se ha roto aguas, bien porque se ha roto en el hospital, el saco amniótico, esa fina cubierta de dos membranas que cubre al feto suele estar roto. Por eso sorprende esta inusual imagen que ha sido compartida más de 23.000 veces en Facebook en pocos días.
En concreto, la vemos en Facebook de “Marie Jeanne, accompagnante à la naissance”, que señala que el origen de la foto proviene de un Tumblr que a su vez remite como origen a otro Tumblr,“Katiohead”, que mantiene una matrona de Oregón y en la que no se ofrecen más datos sobre fecha o lugar del parto.
Realmente es un momento único, y muy corto, ya que al bebé que nace de este modo enseguida le rompen el saco amniótico para poder cortar y pinzar el cordón.
Se trata de un “parto velado”, que es muy raro y puede suceder en parto natural o por cesárea (como parece que fue el de la foto). Ver al bebé inmerso en el líquido amniótico, tal y como estaba hace unos minutos en el vientre materno, es impresionante.
Aquí podemos ver otro ejemplo de un bebé nacido con el saco amniótico intacto tras una cesárea, incluso en la fotografía parece apreciarse al bebé succionando su dedo en el interior del saco. En este otro caso tenemos el vídeo de un parto vaginal en el agua y el bebé nacido en su bolsa amniótica.
Si en los hospitales se respetaran más los ritmos del parto y no se produjera tan habitualmente la rotura de membranas de forma artificial, tal vez estaríamos más acostumbrados a esta imagen.
Recordemos que hay investigaciones que aseguran que la rotura artificial de la bolsa no implica un parto más rápido y la OMS argumenta que no está justificada la rotura precoz artificial de membranas como procedimiento de rutina.
Realmente me parece impresionante la foto del bebé que ha nacido con el saco amniótico intacto, no me extraña que esté siendo un fenómeno en internet que se suma a esas imágenes increíbles que de vez en cuando nos llegan.


Entre muchos de los mitos que rodean al parto, es posible que hayáis oído hablar del parto seco, una expresión utilizada (más antes que ahora) cuando se produce la rotura de la bolsa amniótica antes de que comiencen las contracciones.
El llamado parto seco no es realmente del todo seco. Cuando se rompe la bolsa siempre queda algo de líquido amniótico dentro del útero rodeando al bebé y además la mujer sigue regenerándolo.
Cada parto es diferente. La bolsa puede romperse espontáneamente antes o durante las contracciones, incluso en algunos casos no se rompe hasta el momento en que el bebé asoma la cabeza y hasta a veces el bebé nace dentro de la bolsa.

Pero la rotura de la bolsa amniótica también puede ser artificial, es decir que la matrona perfora las membranas por medio de una maniobra llamada amniotomía.
Hoy en día es bastante habitual la práctica médica de romper aguas de forma artificial supuestamente para acortar el trabajo de parto, sin embargo hay investigaciones que aseguran que la rotura artificial de la bolsa no implica un parto más rápido.
Por su parte, la OMS argumenta que no está justificada la rotura precoz artificial de membranas como procedimiento de rutina.
Una vez rota la bolsa, por lo general se espera a que se desencadene el parto en las siguientes 24 horas (depende del centro y de las características del parto puede ser menos o más tiempo).
Si no se produce, se provoca el parto para evitar una infección ya que la bolsa actúa como barrera de protección ante los gérmenes que pudieran ascender por la vagina. Al romperse la bolsa el riesgo de infección es mayor a medida que pasa el tiempo, sobre todo si se producen tactos vaginales.
Se cree que el parto seco es más doloroso que el parto en el que se rompen aguas de forma tardía ya que con la bolsa intacta el líquido amniótico ayuda a atenuar la intensidad del dolor de las contracciones.