"La guerra se la tenemos que hacer del modo que podamos; si no tenemos dinero, carne y pedazo de tabaco no nos tiene que faltar; cuando se acaben los vestuarios, nos vestiremos con las bayetitas que nos trabajan nuestras mujeres y si no, andaremos en pelota como nuestros paisanos los indios. Seamos libres y lo demás, no importa nada..."
Frase atribuida a San Martín en medio de la lucha por la independencia.
"No ahorre sangre de gauchos mi general, que es lo único que tienen de humano" Frase de Domingo Sarmiento, que compartió con Mitre entonces presidente de la nación. Sarmiento le pedía a Mitre que mande al frente de batalla en la Guerra del Paraguay a los indios y a los gauchos con el fin de exterminarlos.
"Hay en el país dos millones de argentinos que estarán dispuestos a economizar sobre el hambre y sobre la sed a fin de cumplir una situación extrema con los compromisos de la Nación hacia sus acreedores extranjeros"
Nicolás Avellaneda presidente de la Argentina en aquel entonces.
"La Argentina, por su independencia recíproca, es desde el punto de vista económico, una parte integrante del imperio británico." Julio Roca (Hijo) Vicepresidente de la nación y artífice del pacto Roca-Runciman
"¿Alguno de ustedes vio alguna vez un dólar?" Juan Domingo Perón. (Presidente entre 1946-1955 y 1973-1974). Pregunta ante la multitud reunida en Plaza de Mayo, durante su primera presidencia.
"Y aunque deje en el camino jirones de mi vida yo sé que ustedes recogerán mi nombre y lo llevarán como bandera a la victoria." Evita. Eva Duarte de Perón, apoyada por la CGT, aspiraba a capturar la vicepresidencia de la Nación. Debió abdicar de esa posibilidad por las presiones del Ejército, el 22 de agosto de 1951 en un acto. Esa frase la pronunció dos meses después.
"Volveré y seré millones." Frase atribuida a Evita ante la inminencia de su muerte.
"Y cuando uno de los nuestros caiga, caerán cinco de ellos." Perón. El 3 de agosto de 1955 Perón ya estaba acorralado por los opositores y muy fastiadiado por los caídos en el bombardeo a Plaza de Mayo que hicieron los opositores con el solo fin de matar a Perón, donde mueriron más de 350 civiles. En el acto de apoyo lanzó un discurso virulento en plaza de Mayo. La gente respondería "íCinco por uno/no va a quedar ninguno!".
"Ni vencedores ni vencidos." Eduardo Lonardi. El general Lonardi fue presidente de facto tras el derrocamiento de Perón el 16 de setiembre de 1955. Con esa frase, pronunciada apenas asaltó el poder, trató de buscar una supuesta conciliación en una sociedad dividida entre peronistas y antiperonistas. Pero la gestión de la Libertadora se perfiló profundamente contraria al peronismo en lo político y en lo social. Lonardi, el nacionalista católico de aquellos pálidos intentos de convivencia, fue reemplazado por Pedro E. Aramburu.
"No renunciaré, no me suicidaré, no me iré del país." Arturo Frondizi. Mientras ejerció la presidencia (1958-1962) Frondizi sufrió 38 "planteos militares": presiones e intimaciones para que cambie sus políticas. Uno de esos planteos conllevó el pedido de renuncia que derivó en esa difundida respuesta. Y Frondizi la cumplió: lo derrocaron y fue deportado a la isla Martín García.
"Hay que pasar el invierno." Alvaro Alsogaray dijo eso luego de asumir como ministro de Economía de Frondizi en junio de 1959. Alsogaray, en un viraje de la política frondicista, congeló los salarios.
"Hay que comer pescado." Alvaro Alsogaray. En su gestión como ministro también dio ese consejo para favorecer la exportación ganadera. También recomendó comer carne de cerdo, por lo que el humorista Landrú comenzó a dibujarlo como un chanchito.
"No voy a admitir que me corran diciendo que Perón no viene porque no puede. En mi fuero íntimo diré: no viene porque no le da el cuero para venir." Alejandro A. Lanusse. El reto lanussista fue lanzado en 1972. Perón retornaría al país en noviembre de ese año por lo cual la imaginería popular respondería, tanto en las manifestaciones de recibimiento, como frente a la casa de Vicente López donde se instaló: "A la lata, al latero/ al viejo le dio el cuero".
"El año 2000 nos encontrará unidos o dominados." Perón. El caudillo utilizaba esta frase en reuniones con estadistas latinoamericanos o con sus enviados a los que recibía en su residencia de Madrid. La incorporó luego a sus discursos.
"íEsos estúpidos que gritan...! Hoy resulta que algunos imberbes pretenden tener más méritos que los que lucharon durante veinte años." Perón. El 1 de mayo de 1974 se enfrentó a la Tendencia Revolucionaria, que se integraba con la JP y Montoneros. Los sectores juveniles criticaban a José López Rega y a Isabel Perón, considerados la derecha del gobierno, al grito de "íQué pasa/ qué pasa qué pasa General/ ta lleno de gorilas el gobierno popular!". Cuando Perón habló de quienes "lucharon durante 20 años" se refería a sindicalistas de la vieja guardia.
"Me llevo en mis oídos la más maravillosa música que es para mí la palabra del pueblo argentino." Perón, el 20 de junio del 74. Así remató el discurso de su última aparición pública, desde el balcón de la Casa de Gobierno. Se le atribuyó un valor profético: murió el 1 de julio.
"Este viejo adversario despide a un amigo." Ricardo Balbín. El líder radical en su discurso fúnebre, luego de la muerte de Perón. Tras años de encono, Perón y Balbín se habían dado un histórico abrazo.
"Los argentinos somos derechos y humanos." Eslogan del régimen militar. Se repartían en obleas que se pegaban en las lunetas de los autos ante la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en 1979. El relator deportivo José María Muñoz incitaba: "Vayan a demostrarle a estos señores de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos cuál es la verdadera cara de la Argentina". Argentina se coronaba campeón mundial juvenil en Japón y algunos grupos hostigaban a quienes hacían denuncias sobre desaparecidos en la sede de la OEA, en avenida de Mayo.
"Los desaparecidos no están, no son." Jorge Rafael Videla. En conferencia de prensa, en 1981.
"Si quieren venir que vengan, les presentarmos batalla." Galtieri. Desde el balcón de la Casa Rosada el presidente de facto pronunció un discurso el 10 de abril de 1982, ocho días después de la temporaria recuperación de las islas Malvinas.
"íQue venga el principito!" Atribuida al gobernador de Malvinas Mario Benjamín Menéndez, aunque la habría pronunciado un miembro de su staff. Así se retaba a la batalla al príncipe Andrés de la corona británica que participó en la guerra como piloto de helicóptero.
"Van a perder los que apuestan al dólar porque hemos eliminado el nivel de sobrevaluación." Lorenzo Sigaut. El ministro de Economía del general Roberto Viola dijo estas palabras el 19 de junio de 1981. Se popularizaron como "el que apuesta al dólar pierde". Después de pronunciadas hubo una maxidevaluación y quedaron como un monumento al engaño público.
"Hubo errores y excesos en la represión del terrorismo que lamentamos." Albano Harguindeguy. El ministro del Interior de Videla hizo esa pálida admisión de la violación a los derechos humanos. Poco después en las manifestaciones opositoras se cantaba: "No hubo errores, no hubo excesos/ son todos asesinos los milicos del Proceso".
"Los desaparecidos/que digan donde están." Madres de Plaza de Mayo. Fue un reiterado reclamo de las Madres que en 1977 comenzaron a girar en torno de la plaza de Mayo.
"El peronismo triunfará conmigo o sinmigo." Herminio Iglesias. El candidato a gobernador del PJ bonaerense en 1983 dejó instalado ese "blooper" verbal.
"Estoy persuadido..." Raúl Alfonsín. El ex presidente radical (1983-1989) usaba este predicativo para subrayar la convicción de sus dichos. El verbo "persuadir" había sido usado con frecuencia en discursos y escritos de Perón.
"Quiero utilizar una frase que no me pertenece, que pertenece ya a todo el pueblo argentino: íNunca más!" Julio César Strassera. Así concluyó el alegato del fiscal en el juicio a las Juntas Militares que culminó en diciembre de 1985. "Nunca más" ya se había popularizado como título del libro donde se recopiló la investigación de la Comisión Nacional por la Desaparición de las Personas (CONADEP).
"Y hoy podemos dar gracias a Dios: la casa está en orden y no hay sangre en la Argentina." Raúl Alfonsín. El entonces presidente describió así, a la gente reunida en la plaza de Mayo, el fin de la rebelión de los carapintada en la Semana Santa de 1987. Con el dictado de las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida, que de todos modos no aplacaron la inquietud militar, la frase "la casa está en orden" pasó a tener un tono irónico y a representar exactamente lo contrario de lo que enuncia. Lo mismo sucedió con el augurio presidencial de aquel domingo 19 de abril, el no menos famoso "íFelices Pascuas!".
"Síganme, que no los voy a defraudar." Carlos Menem. Frase de campaña del candidato peronista en 1989.
"Por los niños pobres que tienen hambre, por los niños ricos que tienen tristeza." Menem. La frase era utilizada como final de discurso desde el menemóvil.
"Yo robo para la corona." José Luis Manzano. La afirmación del ex ministro del Interior fue sostenida por testigos del restaurante donde la pronunció y fue publicada por primera vez el 6 de mayo de 1990.
"Estamos mal pero vamos bien." Menem. El Presidente reiteró esa frase para definir el arranque de su modelo económico basado en una alianza con sectores empresariales y liberales que, en febrero de 1990, recibía críticas del PJ. La frase, con gran penetración, lleva casi una década de vigencia: representa el porvenir que no viene nunca.
"Relaciones carnales." Guido Di Tella. El canciller definió así los vínculos con Estados Unidos a principios de 1991. Di Tella utilizó esa imagen sexual en un estilo irónico que le es propio y buscando transformar en positivo algo que suele definirse como negativo tal como es la "relación carnal" con una potencia hegemónica.
"Dicen que soy aburrido." Fernando de la Rúa. Hace unas semanas, en un spot publicitario, el candidato a presidente de la Alianza buscó hacer de esa fama un mérito y contraatacar al menemismo.
"No hay crisis." Fernando de la Rúa en la noche del 19 de diciembre de 2001 con el país en llamas, al día siguiente firmaría su renuncia.
"El que depositó pesos recibirá pesos, el que depositó dólares recibirá dólares". Eduardo Duhalde, presidente de la nación, con motivo del corralito emitió esa frase. Al poco tiempo impondría una pesificación de los depositos en dólares.
"El que apuesta al dólar pierde" Eduardo Duhalde, a la hora de la devaluación exclamó esa frase, semanas después el dólar trepaba a los 3,98 $.
"Hay que meterle bala a los ladrones." Carlos Ruckauf. El candidato a gobernador bonaerense trató de captar votos con una violencia verbal que le abrió varios frentes de tormenta.
"No vamos a pagar la deuda a costa del hambre del pueblo." El presidente Kirchner a la hora de su asunción.
"Hoy podemos decir que le pagaremos al FMI toda la deuda antes de que termine el año." Frase del mismo presidente un tiempo después.
Frase atribuida a San Martín en medio de la lucha por la independencia.
"No ahorre sangre de gauchos mi general, que es lo único que tienen de humano" Frase de Domingo Sarmiento, que compartió con Mitre entonces presidente de la nación. Sarmiento le pedía a Mitre que mande al frente de batalla en la Guerra del Paraguay a los indios y a los gauchos con el fin de exterminarlos.
"Hay en el país dos millones de argentinos que estarán dispuestos a economizar sobre el hambre y sobre la sed a fin de cumplir una situación extrema con los compromisos de la Nación hacia sus acreedores extranjeros"
Nicolás Avellaneda presidente de la Argentina en aquel entonces.
"La Argentina, por su independencia recíproca, es desde el punto de vista económico, una parte integrante del imperio británico." Julio Roca (Hijo) Vicepresidente de la nación y artífice del pacto Roca-Runciman
"¿Alguno de ustedes vio alguna vez un dólar?" Juan Domingo Perón. (Presidente entre 1946-1955 y 1973-1974). Pregunta ante la multitud reunida en Plaza de Mayo, durante su primera presidencia.
"Y aunque deje en el camino jirones de mi vida yo sé que ustedes recogerán mi nombre y lo llevarán como bandera a la victoria." Evita. Eva Duarte de Perón, apoyada por la CGT, aspiraba a capturar la vicepresidencia de la Nación. Debió abdicar de esa posibilidad por las presiones del Ejército, el 22 de agosto de 1951 en un acto. Esa frase la pronunció dos meses después.
"Volveré y seré millones." Frase atribuida a Evita ante la inminencia de su muerte.
"Y cuando uno de los nuestros caiga, caerán cinco de ellos." Perón. El 3 de agosto de 1955 Perón ya estaba acorralado por los opositores y muy fastiadiado por los caídos en el bombardeo a Plaza de Mayo que hicieron los opositores con el solo fin de matar a Perón, donde mueriron más de 350 civiles. En el acto de apoyo lanzó un discurso virulento en plaza de Mayo. La gente respondería "íCinco por uno/no va a quedar ninguno!".
"Ni vencedores ni vencidos." Eduardo Lonardi. El general Lonardi fue presidente de facto tras el derrocamiento de Perón el 16 de setiembre de 1955. Con esa frase, pronunciada apenas asaltó el poder, trató de buscar una supuesta conciliación en una sociedad dividida entre peronistas y antiperonistas. Pero la gestión de la Libertadora se perfiló profundamente contraria al peronismo en lo político y en lo social. Lonardi, el nacionalista católico de aquellos pálidos intentos de convivencia, fue reemplazado por Pedro E. Aramburu.
"No renunciaré, no me suicidaré, no me iré del país." Arturo Frondizi. Mientras ejerció la presidencia (1958-1962) Frondizi sufrió 38 "planteos militares": presiones e intimaciones para que cambie sus políticas. Uno de esos planteos conllevó el pedido de renuncia que derivó en esa difundida respuesta. Y Frondizi la cumplió: lo derrocaron y fue deportado a la isla Martín García.
"Hay que pasar el invierno." Alvaro Alsogaray dijo eso luego de asumir como ministro de Economía de Frondizi en junio de 1959. Alsogaray, en un viraje de la política frondicista, congeló los salarios.
"Hay que comer pescado." Alvaro Alsogaray. En su gestión como ministro también dio ese consejo para favorecer la exportación ganadera. También recomendó comer carne de cerdo, por lo que el humorista Landrú comenzó a dibujarlo como un chanchito.
"No voy a admitir que me corran diciendo que Perón no viene porque no puede. En mi fuero íntimo diré: no viene porque no le da el cuero para venir." Alejandro A. Lanusse. El reto lanussista fue lanzado en 1972. Perón retornaría al país en noviembre de ese año por lo cual la imaginería popular respondería, tanto en las manifestaciones de recibimiento, como frente a la casa de Vicente López donde se instaló: "A la lata, al latero/ al viejo le dio el cuero".
"El año 2000 nos encontrará unidos o dominados." Perón. El caudillo utilizaba esta frase en reuniones con estadistas latinoamericanos o con sus enviados a los que recibía en su residencia de Madrid. La incorporó luego a sus discursos.
"íEsos estúpidos que gritan...! Hoy resulta que algunos imberbes pretenden tener más méritos que los que lucharon durante veinte años." Perón. El 1 de mayo de 1974 se enfrentó a la Tendencia Revolucionaria, que se integraba con la JP y Montoneros. Los sectores juveniles criticaban a José López Rega y a Isabel Perón, considerados la derecha del gobierno, al grito de "íQué pasa/ qué pasa qué pasa General/ ta lleno de gorilas el gobierno popular!". Cuando Perón habló de quienes "lucharon durante 20 años" se refería a sindicalistas de la vieja guardia.
"Me llevo en mis oídos la más maravillosa música que es para mí la palabra del pueblo argentino." Perón, el 20 de junio del 74. Así remató el discurso de su última aparición pública, desde el balcón de la Casa de Gobierno. Se le atribuyó un valor profético: murió el 1 de julio.
"Este viejo adversario despide a un amigo." Ricardo Balbín. El líder radical en su discurso fúnebre, luego de la muerte de Perón. Tras años de encono, Perón y Balbín se habían dado un histórico abrazo.
"Los argentinos somos derechos y humanos." Eslogan del régimen militar. Se repartían en obleas que se pegaban en las lunetas de los autos ante la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en 1979. El relator deportivo José María Muñoz incitaba: "Vayan a demostrarle a estos señores de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos cuál es la verdadera cara de la Argentina". Argentina se coronaba campeón mundial juvenil en Japón y algunos grupos hostigaban a quienes hacían denuncias sobre desaparecidos en la sede de la OEA, en avenida de Mayo.
"Los desaparecidos no están, no son." Jorge Rafael Videla. En conferencia de prensa, en 1981.
"Si quieren venir que vengan, les presentarmos batalla." Galtieri. Desde el balcón de la Casa Rosada el presidente de facto pronunció un discurso el 10 de abril de 1982, ocho días después de la temporaria recuperación de las islas Malvinas.
"íQue venga el principito!" Atribuida al gobernador de Malvinas Mario Benjamín Menéndez, aunque la habría pronunciado un miembro de su staff. Así se retaba a la batalla al príncipe Andrés de la corona británica que participó en la guerra como piloto de helicóptero.
"Van a perder los que apuestan al dólar porque hemos eliminado el nivel de sobrevaluación." Lorenzo Sigaut. El ministro de Economía del general Roberto Viola dijo estas palabras el 19 de junio de 1981. Se popularizaron como "el que apuesta al dólar pierde". Después de pronunciadas hubo una maxidevaluación y quedaron como un monumento al engaño público.
"Hubo errores y excesos en la represión del terrorismo que lamentamos." Albano Harguindeguy. El ministro del Interior de Videla hizo esa pálida admisión de la violación a los derechos humanos. Poco después en las manifestaciones opositoras se cantaba: "No hubo errores, no hubo excesos/ son todos asesinos los milicos del Proceso".
"Los desaparecidos/que digan donde están." Madres de Plaza de Mayo. Fue un reiterado reclamo de las Madres que en 1977 comenzaron a girar en torno de la plaza de Mayo.
"El peronismo triunfará conmigo o sinmigo." Herminio Iglesias. El candidato a gobernador del PJ bonaerense en 1983 dejó instalado ese "blooper" verbal.
"Estoy persuadido..." Raúl Alfonsín. El ex presidente radical (1983-1989) usaba este predicativo para subrayar la convicción de sus dichos. El verbo "persuadir" había sido usado con frecuencia en discursos y escritos de Perón.
"Quiero utilizar una frase que no me pertenece, que pertenece ya a todo el pueblo argentino: íNunca más!" Julio César Strassera. Así concluyó el alegato del fiscal en el juicio a las Juntas Militares que culminó en diciembre de 1985. "Nunca más" ya se había popularizado como título del libro donde se recopiló la investigación de la Comisión Nacional por la Desaparición de las Personas (CONADEP).
"Y hoy podemos dar gracias a Dios: la casa está en orden y no hay sangre en la Argentina." Raúl Alfonsín. El entonces presidente describió así, a la gente reunida en la plaza de Mayo, el fin de la rebelión de los carapintada en la Semana Santa de 1987. Con el dictado de las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida, que de todos modos no aplacaron la inquietud militar, la frase "la casa está en orden" pasó a tener un tono irónico y a representar exactamente lo contrario de lo que enuncia. Lo mismo sucedió con el augurio presidencial de aquel domingo 19 de abril, el no menos famoso "íFelices Pascuas!".
"Síganme, que no los voy a defraudar." Carlos Menem. Frase de campaña del candidato peronista en 1989.
"Por los niños pobres que tienen hambre, por los niños ricos que tienen tristeza." Menem. La frase era utilizada como final de discurso desde el menemóvil.
"Yo robo para la corona." José Luis Manzano. La afirmación del ex ministro del Interior fue sostenida por testigos del restaurante donde la pronunció y fue publicada por primera vez el 6 de mayo de 1990.
"Estamos mal pero vamos bien." Menem. El Presidente reiteró esa frase para definir el arranque de su modelo económico basado en una alianza con sectores empresariales y liberales que, en febrero de 1990, recibía críticas del PJ. La frase, con gran penetración, lleva casi una década de vigencia: representa el porvenir que no viene nunca.
"Relaciones carnales." Guido Di Tella. El canciller definió así los vínculos con Estados Unidos a principios de 1991. Di Tella utilizó esa imagen sexual en un estilo irónico que le es propio y buscando transformar en positivo algo que suele definirse como negativo tal como es la "relación carnal" con una potencia hegemónica.
"Dicen que soy aburrido." Fernando de la Rúa. Hace unas semanas, en un spot publicitario, el candidato a presidente de la Alianza buscó hacer de esa fama un mérito y contraatacar al menemismo.
"No hay crisis." Fernando de la Rúa en la noche del 19 de diciembre de 2001 con el país en llamas, al día siguiente firmaría su renuncia.
"El que depositó pesos recibirá pesos, el que depositó dólares recibirá dólares". Eduardo Duhalde, presidente de la nación, con motivo del corralito emitió esa frase. Al poco tiempo impondría una pesificación de los depositos en dólares.
"El que apuesta al dólar pierde" Eduardo Duhalde, a la hora de la devaluación exclamó esa frase, semanas después el dólar trepaba a los 3,98 $.
"Hay que meterle bala a los ladrones." Carlos Ruckauf. El candidato a gobernador bonaerense trató de captar votos con una violencia verbal que le abrió varios frentes de tormenta.
"No vamos a pagar la deuda a costa del hambre del pueblo." El presidente Kirchner a la hora de su asunción.
"Hoy podemos decir que le pagaremos al FMI toda la deuda antes de que termine el año." Frase del mismo presidente un tiempo después.