
Su vida, elocuente testimonio de lo que un hombre de principios es capaz de lograr, nos recuerda que el honor y el valor son virtudes públicas indispensables.
Nunca abandonó sus ideales, nunca titubeó en sus principios, nunca renunció a sus convicciones.
En uno de los momentos más importantes de nuestra historia nacional, fue leal a Argentina, leal a Cristina Kirchner y leal a la Constitución de la República.
Su inquebrantable voluntad y su vertical espíritu nacional, nos llevan a reflexionar sobre los retos presentes y los objetivos que los argentinoss nos hemos trazado.
Lo que es notable en este gobierno, es la vocación social y la determinación para lograr mejores condiciones de vida y seguir construyendo la Argentina fuerte que todos queremos.
Una Argentina Segura, Humana, Competitiva y Sustentable, nuestra casa en común, el espacio siempre solidario y de felicidad de todos nosotros y de nuestros hijos.
De seguir trabajando intensamente por la grandeza de todos y todas.
Una Argentina incluyente, unida y solidaria, una Argentina justa para todos.
Sigamos trabajando unidos Todos por Argentina, junto a Cristina y Daniel..

