En los restaurantes que recrean la típica comida americana nunca faltan aperitivos a base de pollo rebozado, son muy prácticos a la hora de compartir y picotear con las manos, y suelen gustar a todo el mundo. Hace tiempo vi por la red una idea interesante que me guardé en la memoria, y qué mejor ocasión que los aperitivos para el Mundial para poner en práctica esta receta de delicias de pollo al horno con Doritos.
Es una receta muy sencilla que funciona sorprendentemente bien. Las piezas de pollo se rebozan primero ligeramente en harina y huevo con leche para cubrirlas después con Doritos triturados. Al cocinarse en el horno ahorramos tiempo y calorías, y la capa exterior queda crujiente y muy sabrosa, siendo perfectos también para mojar en salsas.
Ingredientes para unas 4 personas
250 g de solomillos de pechuga de pollo o pechugas cortadas en tiras, 1 bolsa de Doritos Tex Mex, 2 huevos L, 50 ml de leche, harina, pimienta negra recién molida.
Cómo hacer aperitivo de delicias de pollo al horno con Doritos
Precalentar el horno a 190ºC y preparar una bandeja cubriéndola con papel sulfurizado o engrasándola con aceite. Secar bien con papel de cocina la carne de pollo, retirar los posibles excesos de grasa y cortar en piezas de unos 4-5 cm de largo. Si queremos la carne más tierna, la podemos dejar marinando en leche durante 30 minutos, secándola bien después.
Triturar los Doritos usando una picadora, procesador de alimentos o machacándolos directamente dentro de la bolsa. Hay que dejar una textura como de pan rallado algo grueso. Disponerlos en un cuenco. Batir los huevos con la leche en otro recipiente y cubrir un plato hondo con la harina.
Pasar cada pieza de pollo con harina, sacudiendo bien el exceso, cubrir con el huevo y rebozar después en los Doritos, apretando bien. Colocar en la bandeja y repetir el proceso con el resto de la carne. Hornear durante unos 25 minutos, hasta que estén bien dorados.
Degustación
Coloca estas delicias de pollo al horno con Doritos en una fuente o bandeja y sírvelas junto con varios cuencos de salsas diferentes y algún acompañamiento de patatas. Cada comensal podrá mojar estos crujientes bocados en su salsa preferida, y al no estar fritos evitaremos manchas de grasa al cogerlos con las manos.