CAMBIA TU VIDA EN 64 DÍAS ¿QUIÉN SE APUNTA?
Tradiciones ancestrales afirmaban que con 64 días era suficiente para lograr un propósito (8x8)
Más información: http://www.narom.org/Cambia%20tu%20vida%20en%2064%20dias.html
Un estudio británico llevado a cabo en el University College de Londres ha demostrado que hacen falta 66 días para que se cree un hábito y pueda mantenerse durante años. Eso significa que si durante ese número de días "repites algo cada día en la misma situación, se convierte en una reacción automática ante dicha situación", explica Jane Wardle, coautora del estudio que se publicaba en la revista European Journal of Social Psychology.
Mi propuesta es que con 64 días es más que suficiente para adquirir un hábito nuevo, saludable e inteligente.
De todos modos si, después de haber realizado el mismo trabajo durante 64 días, deseas hacerlo otros 2 días más no creo que, a esas alturas, tengas algún problema en hacer dos días extras ó dos décadas más.
Podéis copiar la imagen de abajo e ir tachando, día a día, hasta completar los 64 días de vuestro reto.
NO HACE FALTA VOLUNTAD
A partir de ese momento el hábito adquiere cierto automatismo, y no hace falta voluntad, ni tan siquiera pensar en ello intencionadamente, para poder repetir dicho comportamiento. Los sujetos del experimento probaron que es válido tanto para hábitos saludables relacionados con la alimentación como con la rutina de practicar ejercicio a diario, por ejemplo 15 minutos de carrera antes de la cena.
Por término medio, los hábitos relacionados con el ejercicio físico tardaban más en adquirirse de manera firme que, por ejemplo, incorporar la costumbre de comer una pieza de fruta cada día.
Con solo 28 días, como se pensaba hasta ahora, las neuronas no asimilan lo suficiente un determinado comportamiento y es fácil abandonarlo, aclaran los autores.
En la antigüedad, el ejercicio rutinario y sistemático de determinadas tareas fue receptado, por ejemplo, por Aristóteles en su obra Ética a Nicómaco como el modo más acertado para producir aprendizaje duradero.
Explicaba Aristóteles lo que él llamaba "hábitos prácticos": Las virtudes no se originan ni por naturaleza ni contra la naturaleza, sino que somos naturalmente aptos para recibirlas, y las completamos por medio de la costumbre.
¡CUIDADO!
Logicamente, si utilizas esos 64 días para iniciarte en el hábito de fumar, del alcohol, de tener miedo, tener enfado o simplemente quedarte sentado en una silla, conseguirás el propósito: acostumbrar a tus neuronas a un nuevo hábito.
Atención. El problema de este sistema es que si lo dejas en la mitad de la tarea, por ejemplo después de 30 días, tendrás que volver a empezar desde cero cuando lo retomes. Las neuronas aún no se habían acostumbrado y, aunque tienen una capacidad plástica muy grande, no son capaces de asimilar el proceso en menos de 64 (66) días.
MÁS INFORMACIÓN: http://www.narom.org/
Tradiciones ancestrales afirmaban que con 64 días era suficiente para lograr un propósito (8x8)
Más información: http://www.narom.org/Cambia%20tu%20vida%20en%2064%20dias.html
Un estudio británico llevado a cabo en el University College de Londres ha demostrado que hacen falta 66 días para que se cree un hábito y pueda mantenerse durante años. Eso significa que si durante ese número de días "repites algo cada día en la misma situación, se convierte en una reacción automática ante dicha situación", explica Jane Wardle, coautora del estudio que se publicaba en la revista European Journal of Social Psychology.

Mi propuesta es que con 64 días es más que suficiente para adquirir un hábito nuevo, saludable e inteligente.
De todos modos si, después de haber realizado el mismo trabajo durante 64 días, deseas hacerlo otros 2 días más no creo que, a esas alturas, tengas algún problema en hacer dos días extras ó dos décadas más.
Podéis copiar la imagen de abajo e ir tachando, día a día, hasta completar los 64 días de vuestro reto.

NO HACE FALTA VOLUNTAD
A partir de ese momento el hábito adquiere cierto automatismo, y no hace falta voluntad, ni tan siquiera pensar en ello intencionadamente, para poder repetir dicho comportamiento. Los sujetos del experimento probaron que es válido tanto para hábitos saludables relacionados con la alimentación como con la rutina de practicar ejercicio a diario, por ejemplo 15 minutos de carrera antes de la cena.
Por término medio, los hábitos relacionados con el ejercicio físico tardaban más en adquirirse de manera firme que, por ejemplo, incorporar la costumbre de comer una pieza de fruta cada día.
Con solo 28 días, como se pensaba hasta ahora, las neuronas no asimilan lo suficiente un determinado comportamiento y es fácil abandonarlo, aclaran los autores.
En la antigüedad, el ejercicio rutinario y sistemático de determinadas tareas fue receptado, por ejemplo, por Aristóteles en su obra Ética a Nicómaco como el modo más acertado para producir aprendizaje duradero.
Explicaba Aristóteles lo que él llamaba "hábitos prácticos": Las virtudes no se originan ni por naturaleza ni contra la naturaleza, sino que somos naturalmente aptos para recibirlas, y las completamos por medio de la costumbre.

¡CUIDADO!
Logicamente, si utilizas esos 64 días para iniciarte en el hábito de fumar, del alcohol, de tener miedo, tener enfado o simplemente quedarte sentado en una silla, conseguirás el propósito: acostumbrar a tus neuronas a un nuevo hábito.
Atención. El problema de este sistema es que si lo dejas en la mitad de la tarea, por ejemplo después de 30 días, tendrás que volver a empezar desde cero cuando lo retomes. Las neuronas aún no se habían acostumbrado y, aunque tienen una capacidad plástica muy grande, no son capaces de asimilar el proceso en menos de 64 (66) días.
MÁS INFORMACIÓN: http://www.narom.org/