La Tanatofobia, más conocida como miedo a la muerte, afecta a millones de personas en todo el mundo. La thanatofobia es el miedo a la muerte, a las cosas muertas, o a cualquier cosa asociada con la muerte. Puedes aprender a sobreponerte a este miedo leyendo este artículo.
Cada persona con miedo a la muerte es distinta. Algunos de estos consejos pueden no funcionar contigo, aunque muchos sí lo harán.
1 Comprende que se trata de un ciclo. La gente nace, la gente muere, más gente nace. No sientas como si te tocara tu turno. Y si crees en la resurrección entenderás que la muerte no es el fin, sino, un cambio en la forma en que vives.
2 Debes saber que las personas no te olvidarán. Serás recordado en la tierra, y tus recuerdos nunca desaparecerán. Aunque la gente fallece constantemente, los recuerdos que dejan tras de sí no lo hacen, y se quedan en los corazones de sus seres queridos. No sientas que ni bien mueras desaparecerás en el olvido. Si eres religioso, estarás con el Dios o los Dioses de tu religión.
3 Conversa con alguien. Es bueno hablar con alguien sobre la muerte, así puedes encontrar alguien en quien confiar.
4 Vive la vida de la forma en que se supone que lo hagas. No desperdicies tu vida preocupándote por la muerte. En su lugar, rellena cada día con toda la alegría que puedas, y no dejes que las pequeñas cosas te molesten. enfocaté en lo positivo.
5 No te preocupes sino hasta que sea necesario. La muerte no es algo de lo que te debas preocupar, sino que debes aceptarla como una parte de la vida. Existe un versículo de la Biblia que dice que hay suficientes preocupaciones para hoy, como para preocuparse por el mañana.
6 Sé optimista. Está demostrado que es menos probable que los optimistas contraigan enfermedades cardíacas que los pesimistas
7 Date cuenta de que existe esperanza. La visión materialista (que la realidad física es la única realidad) no es científica, sino uno más de los sistemas de creencias, una religión entre muchas. Nadie sabe qué pasa cuando mueres. Abraza el misterio de lo desconocido.
8 La muerte no es igual al dolor. Aunque la vida merece ser vivida, recuerda que cuando estés muerto no sufrirás ni sentirás dolor.
9 Está bien preocuparse por la muerte de otro ser vivo, pero recuerda que son seres como tú, y que pueden adaptarse a los cambios y sobreponerse a las situaciones adversas.
Consejos:
*Que tu vida sea tan rica, disfrutable y completa como te sea posible.
*Considera conversar con un profesional.
*Intenta pensar que después de morir irás a un lugar feliz. Muchas religiones lo creen.
*Intenta pensar en los lugares más felices del planeta.
*Recuérdate que estás saludable, y que tienes toda tu vida por delante.
*Sé completamente honesto, y enfrenta tu propia mortalidad. Se carcomerá por dentro hasta que lo hagas. La vida se vuelve más valiosa cuando te das cuenta de su temporalidad.
*Olvídate de la muerte y vive lo más que puedas. Hoy estamos aquí en la tierra, mañana no sabemos, nos vamos físicamente, pero espiritualmente seguimos vivos mas allá de la muerte.
Advertencias:
*El miedo a la muerte puede ser señal de depresión.
*Contacta a tu médico si la fobia se vuelve abrumadora y te impide seguir con tu vida normal.
Cada persona con miedo a la muerte es distinta. Algunos de estos consejos pueden no funcionar contigo, aunque muchos sí lo harán.

1 Comprende que se trata de un ciclo. La gente nace, la gente muere, más gente nace. No sientas como si te tocara tu turno. Y si crees en la resurrección entenderás que la muerte no es el fin, sino, un cambio en la forma en que vives.

2 Debes saber que las personas no te olvidarán. Serás recordado en la tierra, y tus recuerdos nunca desaparecerán. Aunque la gente fallece constantemente, los recuerdos que dejan tras de sí no lo hacen, y se quedan en los corazones de sus seres queridos. No sientas que ni bien mueras desaparecerás en el olvido. Si eres religioso, estarás con el Dios o los Dioses de tu religión.

3 Conversa con alguien. Es bueno hablar con alguien sobre la muerte, así puedes encontrar alguien en quien confiar.

4 Vive la vida de la forma en que se supone que lo hagas. No desperdicies tu vida preocupándote por la muerte. En su lugar, rellena cada día con toda la alegría que puedas, y no dejes que las pequeñas cosas te molesten. enfocaté en lo positivo.

5 No te preocupes sino hasta que sea necesario. La muerte no es algo de lo que te debas preocupar, sino que debes aceptarla como una parte de la vida. Existe un versículo de la Biblia que dice que hay suficientes preocupaciones para hoy, como para preocuparse por el mañana.

6 Sé optimista. Está demostrado que es menos probable que los optimistas contraigan enfermedades cardíacas que los pesimistas

7 Date cuenta de que existe esperanza. La visión materialista (que la realidad física es la única realidad) no es científica, sino uno más de los sistemas de creencias, una religión entre muchas. Nadie sabe qué pasa cuando mueres. Abraza el misterio de lo desconocido.

8 La muerte no es igual al dolor. Aunque la vida merece ser vivida, recuerda que cuando estés muerto no sufrirás ni sentirás dolor.

9 Está bien preocuparse por la muerte de otro ser vivo, pero recuerda que son seres como tú, y que pueden adaptarse a los cambios y sobreponerse a las situaciones adversas.
Consejos:
*Que tu vida sea tan rica, disfrutable y completa como te sea posible.
*Considera conversar con un profesional.
*Intenta pensar que después de morir irás a un lugar feliz. Muchas religiones lo creen.
*Intenta pensar en los lugares más felices del planeta.
*Recuérdate que estás saludable, y que tienes toda tu vida por delante.
*Sé completamente honesto, y enfrenta tu propia mortalidad. Se carcomerá por dentro hasta que lo hagas. La vida se vuelve más valiosa cuando te das cuenta de su temporalidad.
*Olvídate de la muerte y vive lo más que puedas. Hoy estamos aquí en la tierra, mañana no sabemos, nos vamos físicamente, pero espiritualmente seguimos vivos mas allá de la muerte.
Advertencias:
*El miedo a la muerte puede ser señal de depresión.
*Contacta a tu médico si la fobia se vuelve abrumadora y te impide seguir con tu vida normal.