De joven atolondrado que viaja por el tiempo a policía encubierto que descubre la magia de las olas, pasando por abogado para, posteriormente, convertirse en El Elegido. Es innegable que Keanu Reeves sea uno de los rostros más queridos en la industria y, especialmente, por haber encarnado a una serie de personajes que ya forman parte de nuestra cultura popular.
… Y estas películas lo demuestran:
My Own Private Idaho
El film de Gus Van Sant es una especia de tragedia moderna que relata la historia de dos jóvenes que se dedican a la prostituirse. Los motivos son muy dispares así como los objetivos que desean alcanzar.
En este caso, Reeves encarnó a Scott Favor, el mejor amigo y objeto de amor de Mike Waters (River Phoenix). Scott es independiente, desenvuelto y rebelde. A pesar de provenir de una familia adinerada, prefiere vender su cuerpo a otros hombres en las calles de Portland.
Una historia de amor trágica en un contexto triste y caótico, características que nos ofrecen una mirada muy diferente a los trabajos que ha realizado este actor.
Point Break
Reeves interpretó a Johnny Utah, un agente del FBI quien es destino investigar una serie de robos en la ciudad de Los Angeles.
A medida de que su investigación avanza, conecta los atracos con unos “apacibles” chicos que aman surfear (y quienes lo toman como una filosofía de vida). Para hacerse amigo de ellos, poco a poco se acerca hasta formar parte del exclusive grupo.
La dinámica que se construye entre Johhny y Bodhi (Patrick Swayze) es una mezcla de amistad y desafío, en las que se muestran los matices de cada personaje y de lo que son capaces de hacer para lograr lo que quieren.
Speed
Las coordenadas son las mimas: Los Ángeles pero la historia es diferente. El cuerpo de policía de la ciudad se ve amenazada por los ataques terroristas por parte un perturbado ex miembro de las fuerzas.
Jack Traven debe enfrentar el reto de detenerlo y de salvar a un grupo de personas que viajan en un autobús por las calles de la metrópoli.
Traven es rápido y con fuerte sentido del deber.
Bram Stoker’s Dracula
Uno de los roles infravalorados del actor es, sin duda, el de su interpretación como Jonathan Harker, el desafortunado abogado que debe viajar a Transilvania; convirtiéndose así en el medio para que Drácula (Gary Oldman) pudiera alcanzar su objetivo final: El amor de Mina (Wynona Ryder).
Su actuación le valió el reconocimiento de la crítica ya que su interpretación fue bastante similar al personaje del libro
The Devil’s Advocate
Kevin Lomax es un abogado ambicioso y exitoso que es contratado en una prestigiosa firma de abogados en New York. Sin embargo, comienzan a suceder una serie de fenómenos tan extraños como diabólicos cada vez más terroríficos.
El trasfondo del film es la lucha del bien y mal, alimentada por otros planteamientos como el poder (y las consecuencias) de las decisiones, a pesar de las oportunidades de revertir la situación.
The Matrix
La trilogía de las hermanas Wachoswki es, sin duda, uno de los mejores films de ciencia ficción y cuya primera parte en 1999, redefiniría producciones posteriores.
Neo es un hacker ampliamente reconocido en la web que se esconde tras el común y solitario Thomas Anderson, un empleado más en una enorme compañía de software.
Una serie de sucesos extraños lo persiguen lo que alimenta la sensación que tiene: Algo no está bien. Finalmente descubre que todo lo que conoce es una mentira y que no es el único que lo sabe.
Es un personaje complejo gracias a que debe asumir un gran peso sobre sus hombros: El destino de la Humanidad.
Much Ado About Nothing
Otro rol que vale la pena ver y más por resultar una adaptación de la obra de la obra teatral homónima de William Shakespeare.
Malhumorado y conspirador, Don John tramará un plan para enemistar a quienes pueda sólo por puro placer.
Un poco de comedia ligera y un Reeves recitando versos, suena a buen plan.
