Buenas. Comparto otra Obra de mi Autoría. Espero sea de su agrado. Gracias.
“UN SECRETO, UNA VERDAD”
Salgo del Cyber apurado, casi corriendo. Suena mi Celular. Atiendo. Lo que me dicen me preocupa aún más. Me apuro más aún… suena nuevamente mi teléfono Celular, esta vez no atiendo ¿Por qué será que no hay nadie en la calle para pedir ayuda? Creo que igual de nada serviría… otra vez suena el Celular. No respondo. Empiezo a sudar y sentir mucho miedo; paranoico tiro el teléfono y comienzo a trotar.
Yo tenía sospechas, estuve investigando, y mis conclusiones es obvio que estaban en lo cierto… sino no me estaría siguiendo esa camioneta con los vidrios polarizados.
Ya estoy muy agitado y cansado, tomaré ese colectivo que me deja en la puerta de mi casa. Ellos saben que yo losé. Me siento en el fondo del vehículo, miro por la ventanilla y la camioneta está detrás. Mi corazón late fuerte. Yo sé lo que hacen y de lo que son capaces de hacer. Maldita sea.
No fue difícil, fue simple, más de lo que esperaba, me bastó los Datos que conseguí. Fui al cyber, entré en la Red, y descubrí que era cierto lo que sospechaba… y ahora ellos saben que losé.
Una pareja viaja conmigo en el colectivo, me miran a cada rato sin disimulo. Ellos saben que yo sé, ellos son parte de ellos. La camioneta sigue detrás. La pareja se levantan de sus asientos y se acercan a mí, me levanto y desciendo del colectivo… corro, corro como jamás antes en mi vida corrí… hasta me sorprendo de mí mismo.
Entro al edificio cuando la camioneta ya me alcanzaba. Uso el ascensor, entro a mi apartamento en el séptimo piso, estoy sudando, y mucho… losé tengo miedo. Escucho pasos, vienen, ya están cerca, pero se arrepentirán. Agarro mi arma y me preparo… están ingresando, apunto, no podrán, no me atraparan. Ellos saben que sé su secreto, mi secreto, el secreto de todos, del Universo. No permitirán que divulgue la Verdad. Apunto, disparo y mi cabeza explota. Casi lo logran cretinos.
José Ifrán.
“UN SECRETO, UNA VERDAD”
Salgo del Cyber apurado, casi corriendo. Suena mi Celular. Atiendo. Lo que me dicen me preocupa aún más. Me apuro más aún… suena nuevamente mi teléfono Celular, esta vez no atiendo ¿Por qué será que no hay nadie en la calle para pedir ayuda? Creo que igual de nada serviría… otra vez suena el Celular. No respondo. Empiezo a sudar y sentir mucho miedo; paranoico tiro el teléfono y comienzo a trotar.
Yo tenía sospechas, estuve investigando, y mis conclusiones es obvio que estaban en lo cierto… sino no me estaría siguiendo esa camioneta con los vidrios polarizados.
Ya estoy muy agitado y cansado, tomaré ese colectivo que me deja en la puerta de mi casa. Ellos saben que yo losé. Me siento en el fondo del vehículo, miro por la ventanilla y la camioneta está detrás. Mi corazón late fuerte. Yo sé lo que hacen y de lo que son capaces de hacer. Maldita sea.
No fue difícil, fue simple, más de lo que esperaba, me bastó los Datos que conseguí. Fui al cyber, entré en la Red, y descubrí que era cierto lo que sospechaba… y ahora ellos saben que losé.
Una pareja viaja conmigo en el colectivo, me miran a cada rato sin disimulo. Ellos saben que yo sé, ellos son parte de ellos. La camioneta sigue detrás. La pareja se levantan de sus asientos y se acercan a mí, me levanto y desciendo del colectivo… corro, corro como jamás antes en mi vida corrí… hasta me sorprendo de mí mismo.
Entro al edificio cuando la camioneta ya me alcanzaba. Uso el ascensor, entro a mi apartamento en el séptimo piso, estoy sudando, y mucho… losé tengo miedo. Escucho pasos, vienen, ya están cerca, pero se arrepentirán. Agarro mi arma y me preparo… están ingresando, apunto, no podrán, no me atraparan. Ellos saben que sé su secreto, mi secreto, el secreto de todos, del Universo. No permitirán que divulgue la Verdad. Apunto, disparo y mi cabeza explota. Casi lo logran cretinos.
José Ifrán.