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Planetas Secundarios:


Este y varios post que iré haciendo se dedicaran a los planetas secundarios. Aprovecho para recordar la definición de planeta. Un planeta es un cuerpo que posee las siguientes características: orbita directamente una estrella, presenta equilibrio hidrostático, y tiene dominancia orbital.

Bien, con esto en mente veamos lo que corresponde a esta entrada. Por definición un planeta secundario es un cuerpo que cumple con todas las características de un planeta excepto que, a diferencia de un planeta, no orbita directamente una estrella, sino otro cuerpo. Este puede ser un planeta principal. Aunque existe un caso conocido de un planeta secundario que orbita un planeta enano. Con esto claro, entremos en materia.



1. La Luna:


La Luna es el único mundo extraterrestre que ha sido visitado por seres humanos hasta la fecha (noviembre de 2015). Este objeto se encuentra en relación sincrónica con la Tierra. Esto quiere decir que debido a las fuerzas de marea, la Luna siempre muestra la misma cara a la Tierra. De este modo, a la Luna le toma el mismo tiempo en rotar que en recorrer su órbita (27 días).



Lado oculto de la Luna:


Nuestro compañero orbita a una distancia de 384.4km de nosotros. Es el único satélite natural de la Tierra. La Luna tiene un diámetro de 3474km. En su superficie se experimente una gravedad de 1,62 m/s². Es el segundo planeta secundario más denso del Sistema Solar.





La Luna no cuenta con una atmosfera significativa. La casi inexistente atmosfera lunar crea una presión de 3×10⁻¹⁰ Pa. Está compuesta en un 25% de Helio, un 25% de Neón, un 23% de Hidrógeno, un 20% Argón y el resto lo forman Metano, Amoníaco junto a trazas de Dióxido de carbono. Las temperaturas pueden llegar desde los 40K (-233 °C) hasta los 396K (123 °C).



La superficie presenta la siguiente composición: Oxígeno (43%), Silicio (21%), Aluminio (10%), Calcio (9%), Hierro (9%), Magnesio (5%), Titanio (2%), Níquel(0,6%), Sodio (0,3%), Cromo (0,2%), Potasio (0,1%), Manganeso (0,1%), Azufre (0,1%), y el resto está formado por Fósforo, Carbono, Nitrógeno, Hidrógeno y Helio.





Los mares lunares son zonas oscuras y planas de origen volcánico relativamente jóvenes. Estos contrastan con las regiones montañosas e irregulares más brillantes y antiguas.



Se está bastante seguro de que en cráteres y depresiones profundas de las zonas polares existe agua en estado sólido.



La estructura interna de la Luna presenta un núcleo interno solido rico en hierro de un radio de 240km. Sobre esto se ubica un núcleo externo fluido formado principalmente de hierro liquido con un radio de alrededor de 300km. Cubriendo el núcleo está un capa divisoria parcialmente derretido con un radio de 500km. Finalmente sobre la estructura interna se encuentran el manto y la corteza lunar.



La luna tiene un campo magnético externo de entre 1nT y 100nT. Menos de una centésima del terrestre. La Luna no cuenta con un dipolo magnético global.









2. Ío:


El más cercano a su planeta principal de los satélites galileanos, planetas secundarios de Júpiter, es el volcánico mundo de Ío. Este orbita a una distancia de 421700km de su planeta principal. Ío tiene un diámetro de 3643,2km. Poco mayor que nuestra Luna, Ío es el cuarto satélite de mayor tamaño en el Sistema Solar. Su gravedad superficial es de 1.796m/s².





A Ío le toma poco más de un día y 18 horas recorrer su órbita alrededor de Júpiter. Le toma el mismo tiempo rotar sobre su eje. Esto es debido a las fuerzas de marea. Ío se ve atormentado por su cercanía a Júpiter. Las fuerzas de marea ejercidas por las gravedades de Júpiter y las demás lunas galileanas, provocan fricción en el interior de Ío. El calor proveniente de esta ficción interna causa su gran actividad volcánica. Ío es el cuerpo con mayor actividad volcánica del Sistema Solar. Algunos materiales provenientes de las erupciones pueden alcanzar alturas de hasta 300km. Algunas de las partículas provenientes de este material escapan de Ío e interactúan con el campo magnético de Júpiter.





Su atmosfera, de tenerla, no es significativa y debe estar compuesta de Dióxido de azufre proveniente de las erupciones volcánicas. Ío es el cuerpo más seco del Sistema Solar. Además, es la Luna más densa del Sistema Solar. La estructura interna de Ío se parecería más a la de los planetas terrestres que a la de una luna del Sistema Solar exterior. Un manto y corteza ricos en silicatos y un núcleo hecho de hierro.



Su superficie posee más de cien montañas que han sido levantadas por la extrema compresión en la base de la corteza de silicatos del satélite. La colorida corteza es debido a los materiales volcánicos. Silicatos, Sulfuro y Dióxido de sulfuro; entre estos.









3. Europa:


Europa es el segundo satélite galileano más cercano a Júpiter. Orbita el gigante gaseoso a una distancia de 670900km. Europa es un poco menor a nuestra Luna en cuanto a tamaño. Tiene un diámetro de poco más de 3100km. Posee una gravedad superficial de 1.314m/s².



Posee un atmosfera extremadamente tenue compuesta principalmente de oxigeno. Su superficie experimenta temperaturas que rondan los -160°C.



Europa recibe una gran cantidad de radiación. Su superficie está expuesta a 540rem por día. Más que suficiente para causar graves enfermedades o la muerte de un ser humano en un día.



La superficie está marcada por rayas oscuras que atraviesan todo el globo. Se piensa que estas líneas son causadas por erupciones de hielo más cálido a medida que la corteza de Europa se abre para exponer capas más cálidas.







La estructura interna de Europa probablemente presente un núcleo metálico de hierro. Sobre este un manto rocoso. Finalmente la capa externa de agua de Europa, se estima, tiene un espesor de 100km. La corteza superior está hecha de agua en estado sólido. Bajo esto, un océano de agua líquida en contacto con el manto rocoso. Europa tiene un campo magnético inducido mediante la interacción con el de Júpiter, lo que sugiere la presencia de una capa conductora debajo de la superficie. Esta capa es probablemente el agua salada del océano líquido.



Europa tiene sincronía orbital debido a las fuerzas de marea. Estas fuerzas calientan el interior de Europa causando que este lance chorros de vapor de agua al espacio. El efecto de marea además contribuye a la formación de rayas en la superficie. Se piensa que de existir un ecosistema en las profundidades del océano interno de Europa, este se alimenta de la energía calórica generada en el manto rocoso. Dichos ecosistemas no serian cosa rara, pues aquí en la Tierra tenemos varios ejemplos. De este modo, Europa es uno de los lugares más prometedores en la búsqueda de vida fuera del planeta Tierra.









4. Ganimedes:


Ganimedes es el planeta secundario más masivo y de mayor tamaño del Sistema Solar. Con un diámetro de 5268km, Ganimedes es mayor en tamaño que Mercurio, aunque menos masivo que este. Ganimedes, además, orbita Júpiter a una distancia de 1070400km. Tiene sincronía orbital. Por lo que le toma siete días recorrer su órbita y rotar sobre su eje. Su gravedad superficial es de 1.428 m/s².



Ganimedes es el objeto de mayor tamaño del Sistema Solar que no cuenta con una atmosfera significativa. Los trazos de atmosfera que posee están compuestos de oxigeno. Su temperatura superficial ronda los -163.15°C.



La superficie de Ganimedes presenta dos tipos de terrenos. El primero, más antiguo y marcado por cráteres. Son regiones más claras marcadas con una extensa gama de surcos y crestas. El segundo tipo de terreno se caracteriza por regiones oscuras y algo más jóvenes. Contiene arcillas y materiales orgánicos.



Ganimedes es el único satélite del Sistema Solar que cuenta con una magnetosfera. Esta magnetosfera se ve envuelta por la de Júpiter pero es independiente de esta. La magnetosfera de Ganimedes es generada por el momento magnético intrínseco del planeta secundario. Este momento magnético es tres veces mayor que el de Mercurio. Ganimedes además posee un campo magnético dipolar inducido por el campo magnético joviano.







Se sospecha que Ganimedes tiene un océano de agua líquida bajo su corteza de hielo. En estudios más recientes se determina que es probable que Ganimedes cuente con una serie de capas de océanos separados por diferentes fases de hielos. El océano más inferior podría estar en contacto con el manteo rocoso, lo cual seria imprescindible para cualquier vida que pueda albergar Ganimedes. El interior de Ganimedes, además presenta un manto rocoso de silicatos. Debajo de este, un núcleo de un radio de 500km que podría estar compuesto de Hierro y Sulfuro de hierro. Es probable también, la existencia de un núcleo liquido rico en Hierro y Níquel. Este explicaría la existencia del campo magnético intrínseco.









5. Calisto:


El más lejano de los satélites galileanos. Calisto es un planeta secundario que orbita Júpiter a una distancia de 1883000km. Calisto es el tercer satélite de mayor tamaño en el Sistema Solar. Con un diámetro de 4821km, es poco menor en tamaño a Mercurio. Calisto tiene una gravedad superficial de 1.235 m/s².



Calisto no se ve tan afectado por el campo magnético de Júpiter debido a su órbita más remota. Por lo que recibe mucha menos radiación de este. Si bien Calisto no experimenta las fuerzas de marea a la que los tres satélites galileanos más próximos a Júpiter están expuestos, este si se encuentra en sincronía orbital. Le toma poco menos de 17 días rotar sobre su eje y recorrer su órbita.



La atmosfera de Calisto no es significativa. Esta extremadamente delgada atmosfera está compuesta de Dióxido de carbono y probablemente de Oxigeno molecular. La temperatura de Calisto ronda los 134K o -139.15°C.



La superficie de Calisto es la más antigua y marcada por cráteres de impacto del Sistema Solar. No muestra signos de actividad geológica. De modo que sus detalles más destacables son producto de impactos. Algunos de los componentes de la superficie son: Hielo de agua, Dióxido de carbono, silicatos y compuestos orgánicos.



La aboyada superficie de Calisto se encuentra sobre una litosfera fría, rígida y helada de entre 80km y 150km de espesor. Debajo de esta corteza es posible la presencia de un océano interno de una profundidad superior a los 100km. Si bien esto contribuiría a la posibilidad de albergar vida, Europa tiene más posibilidades de sostenerla debido al calentamiento de mareas. Fenómeno del que Calisto carece. El interior del planeta secundario esta probablemente compuesto de roca y hielos comprimidos. En el centro de Calisto se ubica un núcleo de silicatos cuyo radio no debe ser mayor de 600km.







Bueno, eso ha sido todo por el momento. Espero haber podido captar tu atención y que hayas disfrutado del post tanto como yo lo he hecho. Aun me quedan varios post de esta serie por delante. Procuraré tenerlos listos lo antes posible. Nos vemos en la próxima.