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A LA HORA SEÑALADA

Entre el organigrama de la televisión, los pedidos de los encargados de seguridad y el festejo por el aniversario de la ciudad de Avellaneda, el clásico terminó acomodándose en el extraño horario del sábado al mediodía. Hubo un intento frustrado de Racing de cambiar, porque su equipo jugó anteanoche e Independiente lo hizo el miércoles. Pero no hubo caso: entre la presión de Jorge Ferraresi, el intendente de Avellaneda, y un pedido del Comité Provincial de Seguridad Deportiva bonaerense de adelantar el cotejo porque necesitan el mayor lapso posible para organizar dos operativos que involucren tantos policías, teniendo en cuenta que el domingo, a las 20.10, jugarán Tigre y Boca. Uno más uno más uno: Independiente y Racing jugarán a las 12 del sábado. Se calcula que entre ambos cotejos habrá destinados unos 2000 agentes.

Mientras tanto, el Colegio de Árbitros de la AFA designó a dedo a Sergio Pezzotta para ser el referí del encuentro. El último clásico que dirigió con Independiente como local fue el 11 de septiembre de 2005, en la victoria de los rojos por 4-0, con tres goles de Sergio Agüero y el restante de Nicolás Frutos.

INDEPENDIENTE
Jugadores bajo la lupa

Los clásicos pueden marcar el futuro de muchos jugadores. Para bien o para mal. En el clásico de Avellaneda del sábado, cada equipo tiene protagonistas para colocar en ambos casilleros. En Independiente, el caso testigo es Patricio Rodríguez. Eterna promesa, puede ser el partido que le permita soltar el apodo de Patito para convertirse Pato. O, por el contrario, una mala tarea puede potenciar ese murmullo de desconfianza de la gente cuando toca la pelota. En situación similar puede ubicarse a Gabriel Milito: ídolo eterno más allá del resultado, su regreso generó ciertas dudas por su nivel. Ernesto Farías y los juveniles promovidos por Christian Díaz no tienen peso negativo sobre sus hombros: van por la gloria. En el arco, Adrián Gabbarini buscará potenciar su solidez.

En Racing hay dos jugadores para los que el derby puede resultar un partido que marque sus destinos: Teófilo Gutiérrez y Giovanni Moreno. Intrascendentes en su juego como nunca antes, cuestionados por primera vez, los colombianos pueden sacar pasaje directo al cielo o al infierno. No habrá término medio para ellos. Como Farías en Independiente, Racing tiene otros nombres que tienen la posibilidad de quedar en el bronce. Esa lista la encabeza Gabriel Hauche, otro jugador que entusiasma más de lo que concreta. En la valla, el seguro Sebastián Saja tiene espalda como para aguantar una floja tarea (salvo alguna equivocación muy grosera) y, si se destaca, puede dar un buen paso rumbo a la idolatría.

Dos técnicos contrapuestos

Mucho que ganar, poco que perder. O viceversa. Escasas veces el fútbol, escasas veces la historia de este partido, entregó realidades tan distintas desde el banco de suplentes. El resumen de los presentes de los entrenadores encaja en el juego de palabras inicial: Christian Díaz tiene demasiado terreno de conquista y poco de retroceso. Si gana, podrá robustecerse en la continuidad como DT del equipo después de mitad de año, si mantiene una campaña, cuanto amenos, decorosa. ¿Alguien podrá negar esa posibilidad después de ganarle a Boca y Racing en un mes y medio? Si pierde, su futuro, aunque con cierto lastre, dependerá de lo que haga en las próximas nueve fechas hasta el fin del Clausura.

Alfio Basile vive un presente totalmente distinto. Él mismo, con sus palabras hablando de renuncia, tomó un veneno con fecha de vencimiento en el clásico. Él mismo se puso presión y les puso presión a sus jugadores ante esta situación. El antídoto será una victoria o un empate que permita elogios, es decir, levantando un resultado o, cuanto menos, no permitiendo la remontada rival tras ir en victoria. Una derrota, según el diccionario Basile, no admitirá términos medios en la mirada futura: será una dolorosa despedida en el partido menos deseado para que esto suceda.

Christian Díaz: mucho que ganar, poco que perder. Alfio Basile: bastante que ganar, demasiado que perder. Entrenadores contrapuestos en el clásico.

RACING
Entre los números y los roces

Cuestión de números. Christian Díaz no definió el equipo y tampoco el esquema para enfrentar a Racing. Puede ser un 4-3-3, un 4-2-31 o un 4-4-2. "Parra y Farías juntos es una alternativa que manejo para el clásico", dijo el DT. Hoy, en la práctica de fútbol, empezaría a diagramarse el equipo que no contará con el suspendido Tuzzio y el lesionado Fredes, aunque volverán Milito y Farías. Una posible alineación: Gabbarini; Velázquez, Milito, Galeano y Argachá; Monserrat, Godoy, Ferreyra; Rodríguez; Farías y Parra.

Julián Velázquez, en lo que tal vez sea su último clásico por una futura venta a Europa, dijo: "Estamos con mucha ansiedad para el clásico, pero tratamos de manejarlo y trabajar para llegar de la mejor manera". Sobre la suma de juveniles en el equipo, comentó: "Es importante que muchos chicos de inferiores hoy sean titulares. Cada vez que puedo trato de hablarles y aconsejarles desde lo que viví yo". Y también se refirió a un tema ineludible: la pica con Gutiérrez. "Sabemos las características que tiene Teo. Igual tenemos que estar tranquilos y demostrar lo que sabemos en la cancha y no reaccionar. Pero tenemos que evitar todo tipo de roces".

Sin pausa y con la actitud como eje

Trece horas después del empate ante San Lorenzo, el plantel de Racing pisaba de nuevo el césped del club para realizar un entrenamiento liviano rumbo al clásico. Si bien no se habló de la posible formación, es probable que no haya cambios respecto al conjunto que actuó anteanoche, ya que Iván Pillud se mostró recuperado de la contractura que lo obligó a dejar la cancha. Un detalle no menor: Basile, de buen humor, habló diez minutos a solas con Giovanni Moreno y luego manejó el entrenamiento en un clima distendido.

Teo Gutiérrez, que será, para bien o mal, un gran protagonista del partido, habló en ESPN Radio Rivadavia sobre su equipo. "Lo que hay que rescatar es que hicimos las cosas bien y teniendo otra actitud. No mejoramos la actitud por lo que dijo Coco. Él sabe lo que dice y cada uno es dueño de sus palabras. Nosotros tenemos que pensar en jugar bien al fútbol y ganar", afirmó. Sobre el clásico, aseguró: "El partido ante Independiente lo tomo con tranquilidad, hay que trabajar y potenciar lo que más nos hace falta. Va a ser muy difícil, ellos son muy rápidos y, además, son locales."