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A la joven de 22 años la llamaban de esa forma por su condición médica y genética. Tras muchos años de burlas y sufrimiento, encontró pareja y tiene una vida envidiable.



Como en los cuentos de hadas, la historia tuvo un final feliz. Sophie Walker de 22 años era discriminada por todos por padecer una enfermedad hereditaria llamadas neurofibromatosis.

La joven, tuvo que hacerse una cirugía muy complicada en noviembre de 2009, cuando solo tenía 14 años. La intervención fue realizada para cortarle parte del exceso de tejido. Sin embargo, el tumor siguió creciendo. A la edad de 18 años, se había sometido a otras dos cirugías faciales para tratar de reducirlo.

Durante años sufrió la burla de los demás niños, pero su vida cambió por completo cuando decidió ir a la Universidad de Harper Adams en Shropshire. Mientras estudiaba se encontró con un viejo conocido, Christian Dibden, con quien comenzó a salir.

Actualmente siguen en pareja, ya llevan más de medio año de relación y su novio no siente vergüenza al estar en público con ella.