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Fue 2 a 1 al Chelsea por la ida de los octavos de final de la Champions League (Kalou había marcado el empate transitorio). Samuel y Zanetti también fueron titulares en un partido cuyo resultado pareció dejar conformes tanto al local como al visitante. La vuelta se jugará en Londres el 16 de marzo.



El estadio Giuseppe Meazza de Milán iba a ser la sede de uno de los encuentros más importantes de la primera ronda de eliminación de la Champions. Los punteros de las ligas italiana e inglesa, Inter y Chelsea respectivamente, serían animadores de una serie que tranquilamente puede ser calificada como una final anticipada. Las miradas no solamente estarían puestas en los 22 que saldrían a la cancha, sino también en los bancos de suplentes, donde José Mourinho enfrenta a sus ex-dirigidos y Carlo Ancelotti vuelve a la ciudad luego de haber sido entrenador del Milan.
Todo comenzó a la altura de las expectativas: luego de una combinación entre Sneijder y Eto´o, Diego Milito entró en el área, desairó con un enganche a Terry y definió fuerte al primer palo del arco de Peter Cech. Era el comienzo soñado para los locales, quienes tenían la posibilidad de controlar el partido con más tranquilidad y jugar con los nervios de su rival. Sin embargo, lejos de acusar el golpe del 0-1, los de Stamford Bridge tomaron la pelota en el medio y pasaron a dominar la posesión de la misma. Lentamente, comenzaron a crear algunas situaciones y Didier Drogba, quien estrelló un tiro libre en el travesaño, se constituía como la principal amenaza para la valla local. Luego, Ballack y Lampard le dieron un poco más de trabajo a Julio César con sendos disparos desde afuera. Inter, que no tenía la pelota mas tampoco sufría en defensa, tuvo la posibilidad de aumentar, pero Eto´o pifió su remate después de un centro atrás de Sneijder. De a poco, los errores e imprecisiones fueron adueñándose del partido y ninguno de los dos podía jugar la pelota con claridad, por lo que fue un buen momento para que se terminara el primer tiempo.
Inter salió al complemento con la intención de cuidar la ventaja. Y se notó. Los locales estaban parados para jugar de contraataque y Chelsea, sin ejercer un dominio abrumador, llevaba las riendas del partido y arriesgaba un poco más. El empate llegó en el momento menos pensado: un remate de Kalou que Julio César no pudo contener se convirtió en el tan importante gol de visitante. Sin embargo, la alegría duró muy poco para "The Blues", porque el "neroazzurro" se puso en ventaja nuevamente sólo tres minutos después, gracias a un zurdazo cruzado formidable de Esteban Cambiasso. Todo volvió a ser como antes, Inter replegado y cediéndole la pelota a un Chelsea que intentaba crearle peligro sin arriesgar demasiado. Entonces, el encuentro se tornó monótono. Solamente la lesión del arquero Peter Cech -quien debió dejar la cancha después de descolgar un centro casi sin oposición- es digna de resaltar. En los últimos minutos quedó la sensación de que el resultado no dejaba del todo disconformes a ninguno de los dos equipos, unos por haber ganado de local y los otros por haber perdido por la mínima diferencia y marcado un gol como visitante. La historia continuará en Stamford Bridge, el 16 de marzo.


Fuente: ole